La comunidad de San Vicente Coatlán alertó que la construcción de la presa Paso Ancho —rebautizada como Margarita Maza— podría detonar enfrentamientos si no se resuelve primero el conflicto agrario que mantienen desde 1970 con Villa Sola de Vega.
Habitantes recordaron que la disputa por más de 19 mil hectáreas ha dejado 40 personas muertas y un desaparecido, y señalaron que parte de la obra se ubicaría en su territorio ancestral. Aseguraron que la tierra forma parte esencial de su identidad y que la omisión de las autoridades ha prolongado la violencia durante décadas.
El proyecto hidráulico se plantea como un suministro de agua para al menos 30 municipios de los Valles Centrales durante medio siglo. Sin embargo, San Vicente Coatlán pidió frenar cualquier avance hasta que se restituya su territorio y se atienda el conflicto.
La comunidad envió una carta a la presidenta Claudia Sheinbaum solicitando una reunión urgente y advirtió que sin una solución al diferendo agrario no existen condiciones de seguridad para el inicio de la presa.