En el Istmo de Tehuantepec volvió a crecer el malestar ciudadano por los apagones. Ayer martes, más de la mitad de Salina Cruz amaneció sin energía eléctrica, en medio de quejas por la falta de avisos previos por parte de las autoridades.
Comerciantes, amas de casa y habitantes de distintas zonas señalaron que, a diferencia de otras ocasiones, nadie informó sobre el corte. Algunas veces la Comisión Federal de Electricidad publica avisos en redes sociales; otras, el gobierno municipal notifica. Pero esta vez —afirman los afectados— el apagón simplemente ocurrió.
Una de las voces fue la de doña Viridiana, propietaria de una miscelánea cerca de la carretera Costera. Relató que la luz se fue desde temprano y que el corte impactó directamente su negocio, pues varios productos requieren refrigeración. “Si nadie avisa, no puedo vender y lo que tengo empieza a echarse a perder”, lamentó.
De acuerdo con comités ciudadanos, la suspensión del servicio afectó a unas 70 colonias, de las 125 que conforman Salina Cruz. Miles de familias pasaron gran parte del día sin electricidad, lo que provocó inconformidad en distintos barrios.
Horas después, el gobierno municipal informó que la CFE les notificó que el suministro se restablecería después de las cinco de la tarde, aunque esto no redujo el enojo de la población por la falta de información previa.
La molestia no es nueva. Ayer por la noche, habitantes del fraccionamiento Guié Ngola realizaron un bloqueo de cuatro horas sobre la carretera Transístmica, entre Tehuantepec y Salina Cruz, para exigir la normalización del servicio ante los apagones constantes que se han registrado en la zona.
